4 DE AGOSTO DE 1939
La hora era inusual. Se había cumplido ya la medianoche y las reclusas dormían ajenas a la tragedia que estaba a punto de ocurrir. La noche era tiempo para recrearse en la última visita de los seres queridos, para abrir las cancelas de la celda y volar libres. El atardecer, en cambio, creaba en la prisión un desasosiego fantasmal. Las horas que transcurrían entre el último recuento del día y las once de la noche eran el momento elegido para las "sacas".
La directora, doña Carmen de Castro, y su lugarteniente, la funcionaria María Teresa Igual, recorrían entonces las galerías con la fatídica lista en la mano. El corazón se desbocaba y amenazaba con escapar por la garganta. Una presión invisible se apoderaba del pecho y un golpe de calor subía hasta la cabeza mientras, uno a uno, desgranaban los nombres de las internas que figuraban en la orden de ejecución para ser conducidas a capilla. Tan sólo unas horas, las que mediaban hasta la madrugada del día siguiente, las separaban de la muerte...
La hora era inusual. Se había cumplido ya la medianoche y las reclusas dormían ajenas a la tragedia que estaba a punto de ocurrir. La noche era tiempo para recrearse en la última visita de los seres queridos, para abrir las cancelas de la celda y volar libres. El atardecer, en cambio, creaba en la prisión un desasosiego fantasmal. Las horas que transcurrían entre el último recuento del día y las once de la noche eran el momento elegido para las "sacas".
La directora, doña Carmen de Castro, y su lugarteniente, la funcionaria María Teresa Igual, recorrían entonces las galerías con la fatídica lista en la mano. El corazón se desbocaba y amenazaba con escapar por la garganta. Una presión invisible se apoderaba del pecho y un golpe de calor subía hasta la cabeza mientras, uno a uno, desgranaban los nombres de las internas que figuraban en la orden de ejecución para ser conducidas a capilla. Tan sólo unas horas, las que mediaban hasta la madrugada del día siguiente, las separaban de la muerte...
Asi comienza la historia de las Trece rosas rojas
Tal día como hoy hace 73 años, el 5 de agosto de 1939 eran rapadas y fusiladas en el cementerio de la Almudena en Madrid ...Y YO CON ESTAS TRECE FOTOGRAFIAS DE ROSAS -TODAS TOMADAS POR GROUCHOMANIACO- QUIERO HACER UN PEQUEÑISIMO HOMENAJE A ESAS POBRES MUJERES Y NIÑAS.
2 comentarios:
Preciosas las fotos, Grou.
Me uno a tu homenaje. Yo no he leído el libro pero sí vi la película y me impactó muchísimo.
Un beso y gracias por recordarlas.
A cual más bonita.
Lo que debieron de pasar no tiene palabras.
Me has emocionado.
Besos, trece.
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