Cuando tienes hijos piensas que nada hay que pueda hacerte tan feliz, hasta que pasan los años y nos promocionan a una categoría superior. Son cosas que te cuentan pero cuando lo vives es difícil explicarlo con palabras, suerte de las miradas, las caricias y los besos. Muchas felicidades, por triplicado, abuelo.
Cuando tienes hijos piensas que nada hay que pueda hacerte tan feliz, hasta que pasan los años y nos promocionan a una categoría superior.
ResponderEliminarSon cosas que te cuentan pero cuando lo vives es difícil explicarlo con palabras, suerte de las miradas, las caricias y los besos.
Muchas felicidades, por triplicado, abuelo.