jueves, 11 de noviembre de 2010

Ayer un test... hoy una pregunta.

Lo de ayer fue un test...
lo de hoy una pregunta de Maurice Maeterlinck :







¿Sabemos como sería una humanidad
que no conociera las flores?




13 comentarios:

  1. Yo te puedo asegurar que en esa humanidad....estaría perdida. Un beso

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  2. Sería una humanidad desflorada! Sonó raro...verdad?


    BESOTES AMIGO!

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  3. No existiría, sin duda.
    Los colores son imprescindibles para muchísimas especies de animales necesarios para el género humano y su ausencia impediría que la humanidad se desarrollase con la normalidad que la hace posible.

    Un beso, Grou

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  4. Winnie0, Stanley Kowalski,Novicia Dalila os ofrezco este trocito, tambien llamado fragmento del Poema Rapto De Amor de José Luis Cano


    ...
    Mira el mundo sin flor. Este haz de rocas
    sólo sombra da al oro que declina.
    Muerto parece el mar. Aquí culmina
    el mineral silencio de dos bocas.
    ...

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  5. Otra pregunta:
    ¿Sabemos cómo es, conociéndolas...?

    Hoy vengo guerrera... y reclamando besos!!!

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  6. Borraeso, no estoy muy seguro... pero estoy convencido de que con flores es mas bonito.
    Pasate por aqui y recoge todos los besos que te apetezcan, solo hay un limite... y no sere yo quien te lo diga.

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  7. Menos florida, por supuesto.

    Aunque yo tengo un concepto de las flores muy amplio: una sonrisa, un piropo, un poema...también son flores, ¿no?

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  8. Winnie0, Stanley Kowalski,Novicia Dalila, S, Borraeso, Luis Antonio os ofrezco el Poema Rapto De Amor de José Luis Cano:




    Mira el mundo sin flor. Este haz de rocas
    sólo sombra da al oro que declina.
    Muerto parece el mar. Aquí culmina
    el mineral silencio de dos bocas.

    Soledad, piedra, amor. La arena yerta
    desolada pasión siente en su seno.
    No hiere su piel muda este sereno
    amor, esta extinguida luz desierta.

    Mira esa roca, oh prisma de ternura.
    Pon tu mano en sus filos dulcemente.
    ¿No sientes en tu palma la silente
    vida que allí se esconde, ahogada, oscura?

    Y el duro corazón que en ella late,
    nuestro crispado amor va serenando
    de un pálpito inmortal, y va arrancando
    luces y sueños de tu seno mate.

    roca es también tu cuerpo, roca o muerte
    tu pálida belleza y tu mirada,
    tu frente, luna ya petrificada
    por este sideral silencio inerte.

    No mires hacia el mar. En esta arena
    clava ya tus dos labios diamantinos.
    Incendia con tu lengua estos caminos
    de calcáreo pesar y extinta vena.

    Muerto está el mundo si tus labios miro.
    La tierra vuelta ya a un perenne ocaso.
    Sólo vuelvo a vivir cuando repaso
    tus brazos, pleamar en donde expiro.

    Este nocturno viento, esta bandera
    de soledad, ondeando por la orilla,
    cómo asola implacable tu mejilla,
    rígida ya en su hálito de cera.

    Muere a solas la tarde, y una broza
    tierna muerdes, de amor languideciendo.
    Todo tu peso núbil voy cediendo
    a esa arena mortal que el labio roza.

    Pero duro, bramante, el mar ya invoca
    nuestro amor, nuestras bocas rutilantes.
    Reclama esta inmortal gloria de amantes,
    pétreo fuego de amor que un astro evoca.

    Clama ya su pasión. ¿No oyes su pecho
    resonar por la inmensa, abierta herida?
    alza pujante que alza una ofrecida,
    cálida espuma en jadeante lecho.

    En ti grabo mis labios y en ti hundo
    mi soledad, mis pulsos invocantes.
    Átate a mí. seremos dos amantes
    en busca del olvido en lo profundo.

    Ciégate en mi clamor. Tras esa bruma,
    ¿no ves el halo de otro paraíso?
    Este viento vibrátil que ya piso,
    aéreamente nos alza y a él nos suma.

    Tromba de amor me arrastra y me desata
    de tus brazos, me arranca de tu frente,
    ya precipita al mar la débil puente
    de mi pecho y tu muerte me arrebata.

    Lejano va tu cuerpo entre la espuma,
    tus miembros ya rendidos a otro amante,
    y te va blanqueando a cada errante
    ola, la blanda sal que el mar rezuma.

    Mientras yo voy profundo, hacia ignoradas
    regiones de un amor más poderoso,
    y un gran mar de metal, ligero, hermoso,
    me tiende sus espumas invioladas.

    Qué lejos está el mundo. Ya la arena
    olvidó mi inquietud bajo otro viento.
    ¿He nacido otra vez? Ya sólo siento
    un cuerpo hermoso, azul, que me encadena.

    Y un oscuro clamor. De nuevo a solas,
    late mi corazón en lo profundo
    de este mar que me asume, y en él hundo
    una sangre de amor bajo las olas.

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  9. Danos tiempo, y lo descubriremos ..!!


    A propósito, sabes lo que vale un ramito de rosas?
    y una rosa ?
    y un billete de metro ? eh, eh ??

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  10. Jordi, no se lo que vale un billete de metro... yo solo viajo en mi Mercedes.
    Un ramo de rosas vale lo que la gratitud de la femina a la que se lo regales, si esta buena... mas.
    Te han expulsado al guapo entrenador portugues... ¡¡¡que pringao!!!

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